Crítica serie «Echo»

Algunos esperabais algo de aquí. Yo absolutamente nada. Y las peores previsiones se confirman. Con Echo se junta todo. Un filón agotado. Una serie barata. Unos estudios sin rumbo ni proyecto. Un empecinamiento en trasladar la ingeniería social al cine con una superheroína sin ningún carisma y con una actriz incapaz de darle aquello de lo que carece de fábrica.

Elegida ahí por ser mujer, descendiente de nativos norteamericanos, ser sordomuda y tener una prótesis en una pierna. Todo con mucho mérito para conseguir triunfar en esta vida, pero eso no asegura que como actriz tenga talento para protagonizar y sostener un proyecto de esta envergadura.. No es culpa suya, pero si Disney/Marvel se siguen empeñando en dar series a cualquier personaje menor de los cómics, lo normal es que ni el mejor actor del mundo consiga evitar que se vea lo artificial que resulta todo en la construcción de estos personajes y en el rumbo y la dialéctica en que incurren las tramas.

Osea, que todo se ha juntado con Echo. Había ciertas expectativas a raíz de la presentación de unos trailers que mostraban escenas de acción y violencia. Etiqueta que ahora parece bastar para catalogar de adulta a una serie. Aunque se limiten a eso y no a mostrar unos superhéroes agotados, a punto de hacer crack y perdidos en los recovecos y la oscuridad de su mente. Si a eso añadimos que Daredevil y Wilson Fisk iban a volver como aperitivo para un hipotético y futuro regreso de la franquicia. las promesas eran mayores. Al final la presencia de Charlie Cox se reduce a una forzada escena de acción donde pelea contra Maya, de apenas tres minutos de duración y a un Vicent D´onofrio desganado, incapaz de darle al personaje la garra que tenía en anteriores apariciones. Cierto es que las líneas de guión son tan pobres que es imposible lucirse en medio de semejante naufragio.

Igual, en parte es culpa nuestra por haber malacostumbrado a los estudios de cine a que el género era inmortal, que todo valía para hacer taquilla y vender merchandising. Que podían reducir presupuesto, exprimir tramas, personajes, repetir historias cambiando solo lo mínimo sin que todo ello petara. Eso ha hecho que en los últimos tres o cuatro años no haya habido ni una sola serie o película de superhéroes que valga minimamente la pena. Y de no ser por el hype que sigue desatando el nombre de Marvel, probablemente nadie vería esto.

Tampoco hay mucho que contar. Aunque si quiero hacer notar la diferencia en cómo por mucho woke (y ya sabéis lo poco que me gusta usar ese adjetivo peyorativo porque no es un término que exprese todo el peligro que encierra esa palabra) y por mucho amago de romper con la historia, nos siguen mostrando el mismo legado histórico de buenos y malos. Cuántas series o películas recientes muestran cómo viven realmente los descendientes de los nativos americanos, en reservas, o guetos, medio idiotizados por el alcohol y la falta de oportunidades. Así el pueblo de Maya, sale representado como un pueblo brilli brilli de purpurina ya unos nativos que viven en paz y armonía con su entorno y su legado tribal. Todo lo contrario de ese capítulo de animación, que yo no he visto, pero que muestra una visión, al margen de inventada, diametralmente distinta del contacto de los españoles con los nativos de Norteamérica.

¿De qué va Echo? Pues otra superheroína, cuyo poder consiste en ser capaz de tener habilidades marciales pese a ser sordomuda y tener una prótesis y enfrentarse a sus dilemas morales. Spoiler. mostrados escuetamente donde sale convertida en esbirro de Wilson Fisk, después de haber perdido a sus padres siendo niña (como todos los superhéroes, claro y es que cambian el nombre y los poderes, pero la historia la conocemos de memoria) y que es utilizada por el villano de turno, hasta que se rebela y lo mata de un disparo a bocajarro, para… ah no, que no lo mata, Fisk resucita como si nada. Y es que estos superhéroes serán la hostia dando leches como panes, pero poco inteligentes y prácticos en asegurarse de que su enemigo la ha diñado, Pues eso, ,con ver hasta ahí es suficiente para entender la ínfima calidad de lo que tenemos en pantalla. Fin spoiler.

Una gran perdida de tiempo de la que no hay mucho más que decir. Yo no esperaba nada, pero al menos sí unos dignos Daredevil y Kingpin, pero es que hasta eso nos ha robado Echo.

NOTA: 1